A principios de marzo de 2016 Alfredo Valerdi (Pamplona, 1970), operario de mantenimiento de la autovía del Camino, sufría un grave accidente en la boca sur de los túneles del Perdón. Estuvo a punto de costarle la vida. Pero no fue así. Hoy, tras varios meses de rehabilitación en la delegación de
Javier Sáenz trabajaba como peón de saneamiento realizando labores de limpieza del alcantarillado. Al mediodía del 17 de septiembre de 2014, después de almorzar, reanudó su trabajo. Estaba en Zolina, limpiando los colectores que vienen del vertedero de Góngora, un sitio especialmente complicado,
Rubén Nevado recuerda el accidente con todo lujo de detalles. La máquina era un hormo elevador, una caja gigante en la que ponían las piezas. Vio que la polea de uno de los laterales estaba suelta. La luz del panel no se veía encendida. Fue a colocar la cadena en la polea cuando se le quedó atrapado