Moverse significa ocupar un espacio compartido en el que tus derechos como peatón, o conductor de algún vehículo, -llámese bici, moto, coche o patín-, coexisten con los derechos de los demás. Ése es el sentido de las ordenanzas de movilidad, la base de las normas de tráfico.
En múltiples ocasiones se ha comentado que la Educación Vial no es otra cosa que una expresión más de la educación cívica, y posiblemente tengan razón. A nuestro entender como organización, la educación vial es mucho más que cumplir una normativa: tiene que ver con el respeto y el civismo, la convivencia y la diversidad, la tecnificación y el medio ambiente en el que vivimos.
En general, los problemas del tráfico vienen dados, bien por aspectos técnicos, urbanísticos, así como por la necesidad de compartir un espacio limitado (una calle, una calzada, una carretera,..), en el que nuestros derechos a ocupar y usar ese espacio están condicionados por los derechos de los demás para utilizar el mismo espacio.
La elección de prioridades de uso de estos espacios ha determinado el diseño de estructuras facilitadoras para algunos medios de transporte individual y colectivo, en detrimento de otros, de menos peso, influencia o interés general. En este sentido, las normas de tráfico surgen como respuesta a la necesidad de establecer acuerdos sobre el uso de las vías públicas (espacio compartido) de forma que lo haga “viable”, y de aplicación universal. Cuando alguien incumple las normas se produce la confrontación de los derechos de unos y otros. Este esquema, aparentemente sencillo, es la base fundamental de la intervención en Educación Vial: que los ciudadanos sientan la necesidad y comprendan los beneficios de cumplir las normas de tráfico como paso definitivo para orientar su conducta y, posiblemente, su actitud con respecto al tráfico y a la convivencia respetable.
Dentro de las líneas de trabajo que Mutua Navarra viene realizando desde el área de Empresa Saludable con la finalidad de construir una Comunidad de Empresas Saludables en la que los principios de fomento de la salud y el bienestar de las personas en sus lugares de trabajo formen parte de sus estrategias empresariales, queremos incluir esta temática sobre la movilidad y la educación vial.
Nuestro mensaje, Al circular, muévete azul, representa el compromiso de Mutua Navarra por difundir y hacer llegar a nuestros asociados y a la sociedad en general un enfoque respetuoso de la convivencia vial y la movilidad de los usuarios de cualquier medio de transporte individual y colectivo, que redunde en una mejora aceptación de los compromisos que como personas que vivimos en colectividad debemos tener presentes y potenciar.
Nos gustaría invitarte a pensar en todo esto, así como a ser también azul al circular. Moverse azul es moverse seguro.
A lo largo del presente año, pondremos en nuestra página Web materiales divulgativos así como realizaremos diferentes acciones de sensibilización y difusión entre las empresas afiliadas con el objetivo de avanzar en la concienciación sobre movilidad y educación vial. Por ello, “al circular, muévete azul”.
Fuente: Los valores en la vía pública. Dirección General de Tráfico.
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